Seguramente todos conocemos la historia de alguien que tiene una gran idea innovadora y que podría revolucionar el mercado, pero desgraciadamente no la lleva a cabo porque no tiene como cristalizarla debido a la falta de dinero.
No todas las grandes empresas comenzaron con el capital que necesitaban, por eso, cuando no existe un capital sólido, existen alternativas de financiamiento como los préstamos para empresas.
Otro aspecto muy importante es que no te quedes con la primera opción que veas. No tengas miedo de comparar, es más, hacerlo es lo más sano porque podrás estudiar diferentes alternativas y al final decidirte por lo que sea mejor para ti y tu empresa.
También es necesario recordar que el crédito debe ser solicitado de manera jurídica, no lo solicites desde tu nombre personal ya que son dos cosas diferentes. Tu línea crediticia personal no deberías mezclarla con la de tu emprendimiento.
¿Cuáles son los préstamos para negocios?
Antes de pedir dinero para tu negocio, hay que determinar la cantidad que necesitas y cómo planeas pagar, para lo cual ayuda tener un plan de negocios bien fundamentado. En un negocio incipiente tener flujo de caja es verdaderamente un apoyo increíble. Sin embargo, no es lo único que se necesita para tener éxito en el mercado. Hay muchos otros factores que necesitas tomar en cuenta y no deben ser descuidados por nada del mundo para que puedas lograr tu cometido de tener éxito.
Según la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), por lo general existen las siguientes modalidades de créditos para negocios:
- Préstamos de instituciones de banca múltiple: consiste en financiamiento para la adquisición de maquinaria, mobiliario y herramientas de trabajo, así como materias primas o en su caso para capital de trabajo (crédito simple). Los montos se determinan según las necesidades y capacidad de pago del empresario y los plazos de pago van de 6 a 60 meses. La mayoría de las instituciones no piden garantías hipotecarias, sino avales o en su caso, la maquinaria, herramientas o materias primas adquiridas quedan como garantía.
- Microcréditos: pequeños montos a tasas accesibles que se adecúan a la necesidad de quien lo solicita. En algunos casos las financieras pueden solicitar un aval u obligado solidario o garantías prendarias. Estos créditos se pueden tramitar de forma individual o grupal. Algunos bancos los ofrecen, pero principalmente lo hacen las Sociedades Financieras Populares (SOFIPO), Sociedades Cooperativas de Ahorro
- Capital Semilla de iniciativas privadas o públicas: apoyo financiero temporal para el arranque y etapa inicial del negocio. Los montos financiados varían dependiendo del negocio y los plazos van de 42 a 48 meses, según el tipo de fondo y/o entidad que otorga el capital.
Riesgos de los préstamos para empresas
Invertir dinero en un negocio siempre implica un riesgo y una responsabilidad que como emprendedor debes considerar. Que te aprueben el crédito apenas es el inicio del trabajo, luego debes seguir en marcha para ser capaz de reponer el dinero al banco a tiempo.
La morosidad y los pagos tardíos son un problema financiero ya que te hacer entrar a una lista a la cual tienen acceso todos los servicios financieros. Además de que, cuando pagas fuera de tu fecha límite, los intereses crecen y comprometen la sobrevivencia de la empresa, al tener que pagar más dinero por recargos, sanciones, entre otros.