El fin del primer trimestre y el compromiso con la declaración de impuestos son la mezcla perfecta para que la pequeña y mediana empresa hagan un “corte de caja” para comparar las expectativas y metas para el año, y los resultados hasta el momento obtenidos.
En caso se encontrarse ante un escenario poco alentador o alejado de lo que esperaban, es normal que lleguen recortes de personal. Sin embargo, cada fin de una relación laboral debe estar justificado y acompañado de los derechos del trabajador.
¿Cuándo se considera un despido injustificado?
Puede darse el caso en que un empleador decida terminar el contrato con uno o más empleados sin mayor explicación, esto no sólo es ilegal sino que tiene consecuencias graves.
Si no queda claro el motivo del despido, pregunta a tu jefe inmediato o al personal de Recursos Humanos, en caso de no recibir respuesta considera que el Artículo 47 de la Ley Federal del Trabajo especifica que las causas por las que un patrón puede despedirte sin responsabilidad alguna para él: entregar documentos falsos o haber mentido sobre tus capacidades para el puesto, violencia, daños intencionales, revelar secretos de la compañía, faltar más de tres veces en un periodo de 30 días, llegar a las instalaciones en estado de embriaguez, etcétera.
Si tu caso no corresponde a ninguno de los anteriores, ni cometiste alguna violación a las cláusulas de tu contrato o reglamento de la empresa, entonces puedes considerar que te despidieron injustificadamente.
¿Qué debo hacer si me despiden injustificadamente?
- Debes negarte a firmar una renuncia, en caso de solicitarlo así tu empleador. Pues eso te dejará sin posibilidades de exigir tus derechos laborales. Si te proponen algún finiquito o liquidación, éste debe corresponder a la cantidad que te corresponde, de otro modo, lo recomendable es que no lo aceptes y no firmes nada.
- Sal de las instalaciones, permanecer ahí te impide alegar despido injustificado.
Aunque tienes dos meses para hacerlo, acude cuanto antes y de preferencia acompañado de un abogado especialista en asuntos laborales a la Junta de Conciliación y Arbitraje. Ahí, como su nombre lo indica, será el lugar en donde, a través de un mediador, buscarán que se llegue a un acuerdo.
¿Qué sigue después?
El proceso puede durar varios meses, pero si tienes todos los documentos que comprueben que trabajaste para la empresa que demandas, como tu contrato y recibos de nómina, podrás seguir en el caso hasta obtener una respuesta favorable.
También podrás acercarte a la Procuraduría Federal de la Defensa del Trabajo (PROFEDET) en donde te asesorarán sin costo en caso de tener recursos limitados, asignándote un abogado.
Teléfonos de orientación laboral: 5134 9800 – 01800 911 7877 – 01800 717 2942.
Correo electrónico: orientacionprofedet@stps.gob.mx
Horarios: de lunes a viernes de 8:30 a 16:30 horas
Página web: profedet.gob.mx
