En el mundo financiero podríamos pensar que los préstamos personales y los créditos
son la misma cosa, pero, a pesar de que se parecen bastante, tienen ciertas
diferencias importantes.
Ambos productos financieros nos permiten tener acceso a cierta cantidad de dinero
que puede ayudarnos a solventar alguna situación importante que se nos presente.
Un crédito es un contrato entre el cliente y la entidad prestamista o financiera que le
da una línea de crédito al primero, o sea, un dinero disponible para que lo use cuando
lo necesite y que tiene que pagar después de un tiempo para volver a disponer de él.
La diferencia con un préstamo personal es que el dinero no se le entrega de un solo
golpe al cliente al comienzo de la operación, sino que podrá utilizarlo según las
necesidades que se le presenten mediante una cuenta o tarjeta de crédito. Otra de las
grandes diferencias con los préstamos personales radica en que una vez que hayas
pagado tu crédito, puedes volver a disponer de él.
Un crédito personal puede ser otorgado a cualquier persona física que tenga o no una
cuenta con el banco al que le está solicitando el producto. Sin embargo, un factor
importantísimo a tomar en cuenta es la tasa de interés promedio de los créditos
personales y sobre todo, el saber que la institución que te lo otorga es una empresa
regulada y autorizada para hacerlo. Además, la CONDUSEF ha comentado que no es
un producto que se debe tomar a la ligera, pues el costo puede llegar a ser muy
elevado.
Los créditos personales se pueden adquirir desde los $1,000 hasta los $5,000 y
muchas personas los contratan para financiar sus negocios, realizar un viaje o dar el
enganche de una vivienda propia.
Para pagar el crédito, todo dependerá de la institución con la que lo contrates y tus
posibilidades financieras, además de tu perfil crediticio. Los plazos pues ser desde los
6, 12, 48 o hasta 96 meses y los pagos se pueden hacer de manera quincenal o
mensual.
Antes de que contrates uno, hay ciertas cosas que debes considerar para no
endeudarte de manera casi irremediable. Recuerda que este producto se debe
manejar con cuidado y es importante conocer bien tus hábitos financieros para que tu
experiencia con el crédito personal sea favorable.
Para empezar, debes ser consciente de tu capacidad de pago y de cuánta urgencia
tienes por el dinero. Debes saber que únicamente si de verdad lo necesitas deberás
contratar este tipo de servicios. Aunado a esto, es importante que tomes en cuenta
las deudas que tengas aparte, para que todo esté considerado dentro de tu plan
financiero y sepas qué tan grave sería si te atrasas en tus pagos.
En segundo lugar, resulta fundamental que compares las opciones que existen en el
mercado. en cuestiones de finanzas, siempre es recomendable hacer una amplia
comparación entre los productos que ofrecen las instituciones bancarias y las
empresas prestamistas que se dedican a distribuir este tipo de servicios. Esto hará
que todo el proceso resulte más confiable para ti y sepas que estás tomando la mejor
decisión en cuanto al producto que contratarás. Haz una lista de pros y contras, te
ayudará mucho a tener claridad sobre las opciones.
Pregunta todas tus dudas, no te quedes con ninguna. Es importante que conozcas a
fondo el funcionamiento de tu crédito para que así no existan ambigüedades entre lo
que contratas y lo que en realidad te cobren al final. Al momento de firmar tu
contrato, verifica que toda la información esté correcta y que los detalles importantes
se incluyan en éste, como la fecha de corte, el concepto y el monto total de las
comisiones.
Recuerda que actualmente contamos con otras opciones para contratar un crédito
aparte de los bancos, como lo son los créditos en línea, los cuales prometen ser más
sencillos de obtener que los otros. Lo importante a tomar en cuenta con este tipo de
productos es que no siempre son las mejores opciones, pues justamente como no
piden tantos requisitos para contratarlos, los intereses y comisiones pueden ser altos
y tu crédito terminará siendo más caro de lo que tenías contemplado en un principio.
Sin embargo, si quieres darle una oportunidad a los créditos personales en línea,
asegúrate que la empresa que te lo otorga es de confianza, de esta manera todo
quedará en orden.
Ahora que ya conoces lo que son los créditos personales, acércate a tu institución de
confianza y pregunta por sus productos, así podrás elegir la mejor opción.
